
Pablo
Gargallo. Biografía y obra
Pablo Gargallo,
considerado el precursor de la escultura en hierro, nació
el 5 de enero de 1881 en Maella (Zaragoza). Su padre poseía
una herrería, aquí aprendió la técnica
de la forja.

En 1888 su familia
emigra a Barcelona por razones económicas y allí comienza
su formación artística en el taller del escultor Eusebio
Arnau y con el escultor Venancio Vallmitjana en la Escuela de Bellas
Artes de La Lonja. En estos momentos en los que en Barcelona se
estaba desarrollando el Modernismo, Gargallo frecuentó las
tertulias de Els Quatre Gats y mantuvo contactos con jóvenes
artistas como Novell o Picasso.
Por
ello, sus primeras obras beben del modernismo. Por ejemplo, Pequeño
desnudo o la decoración de edificios barceloneses que
realizó en colaboración con el arquitecto Doménech
i Montaner, como son el Hospital de la Santa Cruz y San
Pablo y el Palau de la Música catalana.
En 1903 obtiene
una beca que le permite ir a París a completar sus estudios.
Su estancia fue breve, pero desde entonces y hasta 1923, que es
cuando se instala definitivamente en la capital francesa, sus viajes
serán frecuentes. Allí encontró las formulaciones
estéticas del Cubismo, asimiló sus sistemas expresivos
y buscó el esquematismo y la esencialidad de figuras y objetos,
tratando de encontrar la auténtica expresión tridimensional
de los postulados cubistas.
Empezó
ya a usar los materiales metálicos como la chapa, el cobre
o el hierro. En torno a 1911-1912 realizó las primeras máscaras,
que son piezas de gran simplificación, elaboradas con chapas
recortadas, ligadas a la estética cubista.
Continuó
utilizando las chapas metálicas y con ellas empezó
a sugerir volúmenes y exaltar los huecos, los vacíos,
mediante la penetración de la luz en los interiores. Como
por ejemplo, El violinista, La toilette o El hombre
de la pipa.
En 1920 es nombrado
profesor de Escultura de la Escuela Técnica de Oficios Artísticos
de la Mancomunidad de Cataluña, y en 1923 será destituido
por razones políticas al proclamarse la dictadura de Primo
de Rivera. Será entonces cuando Gargallo se instale definitivamente
en París con su mujer y su hija.
A partir de
este momento su estilo adquiere una dimensión muy personal,
derivada de la interpretación del cubismo. Se basa en la
búsqueda de una síntesis formal de la figura en planos
geométricos siempre fluidos y en la valoración de
los huecos y los macizos. Sustituye los materiales convencionales
como el mármol o el bronce por las láminas de hierro
forjado. Crea un nuevo lenguaje escultórico introduciendo
el vacío como volumen y dotando a sus figuras de gran dramatismo
expresivo.
Alguna de sus
obras más representativas son Aguadoras, El joven
de la Margarita, El Arlequín o La Bañista.
El Profeta
Esta escultura
de hierro es una de las últimas obras de Gargallo. En ella
intenta esculpir el vacío, el hueco, al contrario de lo que
sucedía en la escultura tradicional que se intentaba dar
forma al volumen.
La luz resbala
por la superficie del bloque, se introduce por el interior y crea
zonas de claroscuro.
El profeta presenta
formas que nos recuerdan a los cubistas, pero se mueve dentro de
los planteamientos espirituales del expresionismo por la dureza,
la agresividad y el carácter de la figura. Representa a un
hombre que está gritando, amenazante, con una mano levantada
en actitud de orador y otra que sujeta un bastón.
Las líneas
y planos nos conducen hacia la cabeza y la boca, que es el centro
expresivo de la figura tanto en su visión frontal como en
las laterales. Si lo miramos desde distintos planos, el profeta
es el mismo, tiene el mismo gesto. La diversidad de puntos de vista
conduce al espectador al movimiento, que ha sido creado a partir
de la materia y el vacío. La imagen cobra cuerpo en el espacio.
Pablo Gargallo
nos sugiere volumen a través del vacío rodeado de
aire y de luz, que da lugar a claroscuros, incrementando así
el dramatismo de la obra.
La aportación
de Gargallo a la escultura contemporánea es la introducción
del nuevo concepto de espacio escultórico. Sugiere la materia
en su ausencia, completa la obra en el espacio mediante la adecuación
de los contrarios, el vacío y el lleno.
