Mariano
Fortuny, Biografía y obra
Biografía
de Mariano Fortuny
Mariano Fortuny
nació en Reus (Tarragona) el 11 de julio de 1838. Desde pequeño
mostró gran afición por el dibujo y la pintura. Su
primera formación oficial la recibe en la Escuela de Bellas
Artes de La Lonja. Acudirá también al estudio de Lorenzale,
que será el maestro que más influye en el joven artista.
Conseguirá
una pensión de la Diputación de Barcelona para trasladarse
a Roma y ampliar allí sus estudios, y a cambio, tendrá
que enviar algunos trabajos que muestren sus progresos.
En octubre de
1859, cuando estalla la guerra entre España y Marruecos,
la Diputación de Barcelona le encarga pintar las obras que
conmemoren los hechos más importantes de la campaña
de España en Marruecos. El 12 de febrero de 1860, llegará
a ese país para tomar apuntes de los acontecimientos más
importantes.
África
supone un nuevo aire para Fortuny, los ambientes, las luces, los
colores y los personajes le cautivan. Se liberará de convencionalismos
y academicismos y se sentirá atraído intensamente
por lo oriental.
Recoge numerosas
escenas costumbristas, que marcaron posteriormente su estilo, caracterizado
por el preciosismo y la luminosidad. La obra más famosa es
La batalla de Tetuán, una pintura histórica de grandes
dimensiones y llena de dinamismo.
Al firmarse
la paz entre España y Marruecos, Fortuny vuelve a Barcelona
pasando por Madrid, donde conocerá a Federico de Madrazo
y a su hija Cecilia, su futura esposa.
De nuevo, Fortuny
se traslada a Roma, donde permaneció gran parte de su carrera
artística, y comenzó a especializarse en obras de
género realizadas en ricos colores. Son cuadros llamados
de "casacón" o gabinete que el pintor Meissonier
puso de moda en Francia, y con los que Fortuny arrasará el
mercado europeo. Tratan asuntos intranscendentes, realizados con
un estilo minucioso y detallista que se preocupa por la luz, el
dibujo y el color.
En la elección
del tema y en las indumentarias incorpora elementos del siglo XVIII,
es frecuente por ejemplo, el uso de pelucas y vestidos dieciochescos.
Las obras más
representativas de este estilo son La vicaría y El
coleccionista de estampas.
Principales
obras de Mariano Fortuny
La vicaría
Es la obra maestra
de Fortuny. La iglesia madrileña de San Ginés, en
la que contrajo matrimonio con Cecilia de Madrazo, le sirve de inspiración
para realizar esta obra.
La vicaría
representa el momento en que los testigos de una boda firman en
la sacristía. Todos los invitados a la ceremonia están
pendientes del acto excepto los personajes de la derecha.
La imagen, es un retrato de la sociedad española del siglo
XVIII, donde están presentes un clérigo, un torero,
un militar y las elegantes damas.
Las principales
características de la obra de Fortuny se resumen en este
cuadro: minuciosidad, preciosismo, cuidado dibujo, amplitud espacial,
gran sentido del color y estupendo estudio lumínico, delicadeza
y verosimilitud en los detalles, perfecta captación de los
distintos tipos de telas e interés por las expresiones de
los personajes.
Elección
de la modelo
Se trata de
un cuadro muy estudiado, ya que existen varios bocetos y dibujos
preparatorios relacionados con la obra.
La escena presenta
a un grupo de académicos que están seleccionando a
una bella modelo. Los académicos se sitúan en la zona
central de la composición y la modelo, a la derecha de la
estancia y subida en una mesa, recibe un foco de luz que baña
su silueta.
Los académicos
van vestidos a la moda dieciochesca, ya que se trata de un cuadro
de "casacón". Observamos el esmerado dibujo, la
minuciosidad preciosista, el interés por la luz, el brillante
colorido y la expresividad en los rostros característicos
de Fortuny
Durante los
últimos años de su vida, Fortuny caerá en una
depresión debido a que para satisfacer a sus clientes y a
sus marchantes, tiene que seguir realizando obras dentro de ese
estilo preciosista del que ya está muy cansado y que le resta
mucha libertad creativa. Quiere innovar, cambiar su temática
y su forma de trabajar, pero el nivel de vida alcanzado le impide
romper con este estilo que tanto éxito le trae.
Este debate interior le lleva a realizar escenas muy distintas a
las que nos tiene acostumbrados, como son Corral o Paisaje.
Desnudo en
la playa
Es la silueta
de uno de sus hijos, que está tumbado al sol en la playa
napolitana de Portici.
La minuciosidad
con que está realizada la imagen, teniendo en cuenta su pequeño
tamaño, demuestra la gran calidad del artista.
El iluminado
y dibujado cuerpo de la muchacha contrasta con la superficie de
alrededor, más oscura y menos trabajada. La preocupación
por la luz y el color que aquí siente enlaza con el Impresionismo.
Fortuny fallecerá
en Roma el 21 de noviembre de 1874, posiblemente a causa de la malaria.