Pirámides
de Egipto y Arquitectura Funeraria egipcia
La Arquitectura
funeraia está relacionada con el más allá y
constituye uno de los ejemplos más representativos de este
arte. Constituye una arquitectura un tanto compleja y segura, esto
explica la idea de esta civilización por construir algo inmodificable.
Tiene dos partes: una parte subterránea con la cámara
mortuoria y el sarcófago y la otra parte es una superestructura
visible. Está construido sobre el suelo y encontramos una
capilla para el culto, la "casa del difunto", donde está
la estela o falsa puerta, que tiene el nombre del difunto, por donde
se comunica con el mundo externo. Suele estar en la pared oeste,
mirando hacia el occidente, al mundo de Osiris. En esta estancia
hay una mesa de ofrendas que puede estar esculpida o pintada. También
suele haber un patio.
Las tumbas evolucionan
dependiendo de las dinastías. En el Imperio Antiguo, de la
dinastía I y II se encuentran pocas tumbas en Abidos, que
generalmente eran hipogeos de adobe.
Se
excava una fosa cubierta de adobe o madera y encima una superestructura:
una gran mesa sin decoración, de estructura alargada o rectangular.
Esa mesa suele ser de material de desechos. Todo ello queda rodeado
por un muro. Cerca solía construirse una barca, cuyo emplazamiento
no es fijo.
En la III dinastía
aparece la pirámide. Todavía no está configurada.
Recibe el nombre de Pirámide Escalonada. En la IV dinastía
aparece la primera pirámide. La mastaba aparece durante estos
siglos. Es el tipo de enterramiento característico de la
III dinastía. Se utiliza para gente distinguida. Primero
se utiliza la mastaba y posteriormente la pirámide.
La mastaba tiene
una capilla para ofrendas, en la que también está
la estela y que se llama capilla de culto (1). Detrás encontramos
otra capilla llamada Serdab (2), donde está el doble del
difunto. Estas dos cámaras quedan aisladas la una de la otra
excepto por un tragaluz que los une. La cámara donde está
el sarcófago está bajo tierra (3). Es imposible llegar
a él debido a que tapan la entrada. A veces en la entrada
de la cámara se han encontrado cabezas representativas.
En el Imperio
Medio se desarrollan las mastabas para la clase media y aparecen
pirámides pequeñas (no tan grandes como las del Imperio
Antiguo). Aparecen también hipogeos, pero más configurados,
excavados en los acantilados del Nilo, en la zona de Beni Hasan.
En el Imperio
Nuevo se siguen utilizando los hipogeos, pero no se encuentran mastabas
ni pirámides. Los enterramientos se realizan en hipogeos
más complejos. No poseen capillas puesto que se construyen
templos. Estos enterramientos están en lugares lejanos y
la cámara funeraria oculta. Son las construcciones que han
llegado hasta nuestros días: Valle de los Reyes, Valles de
las Reinas, etc.
En la Baja Época
las cámaras funerarias se encuentran en templos. Ya no hay
grandes manifestaciones funerarias.
Imperio
Antiguo
En el Imperio Antiguo se utilizaban las pirámides. Una pirámide
es un enterramiento cuya forma tiene un simbolismo religioso y ciertamente
político. El simbolismo religioso es la representación
de Ra, dios del Sol en todo su esplendor. Ra se encuentra en la
cúspide y llega al suelo mediante los lados de la pirámide
y abarca toda la tierra de Egipto. El simbolismo político
sería la relación entre la divinidad y el faraón.
Constituye una masa cerrada, no tiene puertas ni ninguna manifestación
al exterior. Son edificios sin retorno.
Las pirámides
más antiguas son las de Zoser de la III dinastía y
las de Snefru de la IV dinastía. Zoser es uno de los faraones
más representativos. La pirámide escalonada de Zoser
está en Saqara. Tiene seis escalones ascendentes que llegan
a los 60 m de altura. A esta pirámide también se le
ha buscado un simbolismo. Los escalones están dirigidos hacia
el cielo para que ascienda el faraón. El origen puede ser
la superposición de mastabas. La pirámide de Zoser
está realizada por Imhotep (era juez, visir, etc.), que realiza
el complejo de la pirámide.
Las otras pirámides
que tenemos son las de Snefru. Son tres pirámides; la de
Snefru en Médium, que es también escalonada, pero
sólo se conservan tres escalones y las otras dos pirámides,
que están en Dahsur: la pirámide acodada y la pirámide
roja.
Las pirámides
más importantes son las de GIZA: Keops, Kefren y Micerinos.
Pirámide
de Keops
Es la más
importante. Mide 146 metros de altura. La entrada está situada
a 18 metros de altura. En el lado este hay tres pirámides
que pertenecen a tres reinas. En el lado oriental hay restos de
un templo y de una ciudad funeraria para los obreros, sacerdotes,
etc. No se ha conservado prácticamente nada de esta ciudad.
Pirámide
de Kefren
Mide 143 metros,
es algo más pequeña que la anterior, pero se conserva
muy bien. Tiene las mismas partes que la de Keops, pero hay un cambio
de plano.
El alzado es
más sencillo que Keops, no tiene sistema de ventilación.
Se conserva el templo funerario a los pies de la pirámide,
que era un templo con una gran complicidad de estancias. Hay una
avenida cubierta que une este templo con el templo del valle y que
se conserva bastante bien. Un poco antes de llegar al templo del
valle se encuentra junto a la galería la esfinge.
La esfinge es
una construcción arquitectónica-escultórica
muy compleja debido a su función y a su significado., aunque
se le considera como guardiana de todo el recinto. Es una construcción
de piedra de aproximadamente 20 metros de altura y unos 57 de longitud.
Tiene el cuerpo de león y la cabeza de hombre, que se ha
pensado que era la de Kefrén.
Tiene tres de
los atributos de un faraón: el nemes, el hureus y la barba
postiza, hoy desaparecida. Tiene una actitud enigmática,
mirando al frente. Entre sus patas hoy hay una estela pero en su
día debía haber un altar en relación a un templo
al aire libre.
El templo del
valle también está excavado. Antes de entrar hay un
altar, con un sentido más simbólico que práctico
debido a su pequeño tamaño. Tiene dos entradas, franqueadas
por esfinges, que nos llevan a un vestíbulo que da acceso
a una sala con forma de T invertida soportada por pilares. Hay distintas
salas con tesoros, en una de ellas había vasos canópicos
y también se han encontrado numerosas estatuas de Kefrén.
Imperio Medio
En el Imperio
Medio aparece una construcción que es un paso intermedio
entre el mundo de las pirámides del Imperio Antiguo y el
mundo de los hipogeos del Imperio Nuevo. Fue mandado construir por
el faraón Mentuhotep (XI dinastía) en Deir el Bahari.
[Tuvo una gran repercusión que influyó por ejemplo
en el templo funerario que se hizo para la reina Hatshesput en el
mismo lugar en el Imperio Nuevo con el mismo sistema de rapas, pórticos,
etc. pero sin pirámide y más monumental.]
Tiene una doble
función de templo y tumba. Está construido al pie
de unas montañas. Tiene dos partes: una primera parte visible,
fastuosa, formada por dos plataformas. Para llegar a la primera
hay una avenida y para acceder a la segunda, que es un poco más
pequeña, hay una rampa. Estas plataformas están soportadas
por pilares que forman una galería porticada, detrás
de la cual había un pequeño templo. Encima había
una pirámide como recuerdo de sus antecesores, pero que no
guarda ningún cuerpo. Hay quien dice que había un
gran altar.
En la segunda
parte hay un patio porticado que va a dar al lugar donde estaba
el enterramiento. Había una capilla funeraria, tras la que
se encontraba una galería que llevaba a la cámara
funeraria, en cuyo interior no hay una gran complicación.
Dentro de esta cámara hay una estatua de Mentuhotep.
Imperio
Nuevo
En el Imperio
Nuevo se utilizan los hipogeos, que son construcciones que pueden
seguir dos modelos, los que se excavan en la roca en horizontal
y, lo que es más normal, los que se excavan en la roca también
en profundidad.
Ambos modelos
se utilizan para ocultar y hacer inviolable la tumba, para lo que
además se va a separar la parte visible, destinada al culto,
de la invisible, el lugar de enterramiento.
También
para esto los monumentos se construyen en el desierto, alejados
de la civilización, y se va a separar el templo del hipogeo.
Estos hipogeos suelen tener una galería, tras la que aparece
una capilla, seguida por otra galería más estrecha
y otra galería que llevaba a la cámara funeraria.
Según se va accediendo al interior, va disminuyendo en altura
y en anchura.
Estos hipogeos
solían estar decorados en su interior y se van cegando las
galerías según entre el cuerpo. En el exterior nada
indica que halla una construcción allí.
De este periodo,
los enterramientos o hipogeos más importantes se encuentran
en el Valle de los Reyes, el Valle de las Reinas (que se encuentra
cercano) y el Valle de los Nobles [por orden de importancia], todos
ellos alejados y rodeados de montañas.
El Valle de
los Reyes estaba presidido por el Qorn, un monte sagrado. En este
lugar los hipogeos van a tener distintas formas y en ellos lo fundamental
va a ser la cámara mortuoria y las cámaras para tesoros.
Para evitar el pillaje cada vez se van haciendo más complicados.
El Valle de los Reyes está en el lado oriental del Norte,
cerca de Tebas. A veces a los hipogeos se les llama siringas porque
imitan la forma de una flauta porque para complicarse se van alargando,
adentrándose en la piedra, donde siempre al final se va a
encontrar la cámara funeraria.