Se
han conservado ciudades, algunas se han podido excavar, pero lo
interesante de ellas es su carácter abierto, sin murallas
ni torreones. Una de las más importantes es Gurnia, en Creta,
o Akrotiri que se encuentra muy bien conservada, con edificios levantados
con pinturas. Las casas no eran demasiado complicadas, generalmente
de dos pisos. En las más ricas se han encontrado pinturas.
Se han hallado maquetas de casas en santuarios como ofrendas que
nos permiten saber cómo eran. Las más importantes
fueron las villas campestres que se han encontrado, pues pertenecían
a los más poderosos.
No hay templos,
aunque sí santuarios, lugares sagrados de carácter
abierto en colinas o montañas. También había
grutas sagradas y oratorios, estos últimos encontrados en
los palacios, de carácter privado. En estos oratorios se
han encontrado estatuillas y lo que parece que eran altares.
La arquitectura
funeraria es muy interesante. Hay múltiples tipos de enterramiento,
aunque ninguno muy complicado. Algunos sólo están
excavados en la roca con pequeñas cámaras. Los tholoi
son cámaras circulares cubiertas con una falsa cúpula
que van a ser precedentes de los micénicos, que son más
significativos. Los tholoi cretenses son más pequeños.
Otro tipo de
enterramiento es la tumba de edificio, que recuerda a una casa.
Tiene forma rectangular y varias habitaciones, en una de ellas es
donde se realizarían los distintos ritos. En todos estos
tipos de enterramiento se ha encontrado un ajuar y sarcófagos.
Estos pueden ser en forma de bañera o rectangulares que descansen
en cuatro patas con una tapadera. Están hechos de terracota
policromada.
La forma más
importante de arquitectura son los palacios. Todos tienen parecida
estructura pero sin someterse a un esquema determinado. Constituyen
verdaderos complejos que tienen distintas reconstrucciones y ampliaciones.
Los más importantes son el de Knossos, Faistos, el palacio
o villa de Hagia Triada y el de Malia. Estos palacios tienen unas
notas comunes:
Cnosos
En Cnosos destacan
las siguientes pinturas:
El príncipe
de los lises
Se encuentra en el palacio de Cnosos. No se sabe quién es,
pero se cree que pudiera ser el rey Minos. Es un rey-sacerdote.
Tiene cuerpo joven y atlético con una cintura muy fina, por
lo que a estas figuras de las denomina "figuras de cintura
de avispa". Lleva la mano derecha sobre el pecho, probablemente
como símbolo de poder, y con la izquierda arrastra algo,
probablemente un grifo. Va caminando entre un campo de lises y hay
una mariposa revoloteando. Lleva collar y una tiara con plumas y
adornado con formas helicoidales. Tiene zonas en relieve.
Fresco de
la parisina
Fue así denominada porque se asemejaba a la moda francesa
del momento en el que se encontró. Es una mujer noble o una
sacerdotisa por su porte, va muy erguida. Su perfil está
marcado con línea. Lleva un traje con un nudo o lazo sagrado
en la espalda.
Procesión
de los coperos
Hombres y mujeres tienen la piel de distinto color. Llevan trajes
típicos, colores iguales y gusto por formas onduladas.
Fresco del
salto del toro
Fue encontrado en Cnosos en una tribuna que da al patio central.
Cumple todas las características de la pintura minoica. Esta
rodeada por una cenefa geométrica y policromada. La escena
se pintó sobre un fondo liso azul.
El mono azul
Está realizado con pasta que se incustra y se colorea. Tiene
un colorido ideal, fantástico, pero en la forma tiene un
claro intento de realismo. La ambientación de la escena es
a base de flores y plantas muy estilizadas. El fondo es ocre.
Cortesanas
Se trataba de cortesanas, por sus adornos.
Akrotiri
El pescador
Aparece
un joven con sartas de pescados. La piel oscura del chico destaca
con el fondo liso claro. El joven está totalmente desnudo
excepto por una gargantilla. Lleva la cabeza rapada con unas especies
de trenzas. Esto seguramente fuera una moda ya que también
se ha visto en otras pinturas. Los peces son casi simétricos.
La figura está en una postura similar a las de Egipto, mitad
de perfil mitad de frente.
En
una habitación, se encontraron representadas varias escenas.
Las pinturas se encuentran ahora en el museo de Atenas, pero están
dispuestas igual que estaban. La puerta está enmarcada por
tonos oscuros. En la parte de arriba hay una cenefa con un motivo
vegetal. En un muro, aparece la escena de los pugilistas,
en la que aparecen dos niños luchando, pero sin violencia.
Están casi desnudos. Llevan la melena recogida en trenzas
o colas. La movilidad está marcada por las posturas.
En otra pared,
aparece la escena de los antílopes, en la que aparecen
dos de estos animales prácticamente trazados, sin colorear.
Son figuras naturalistas, especialmente en la forma en la que se
ha captado la postura. Pese a no haber perspectiva, si hay distintos
planos.
Viaje
Esta pintura se aparta un poco de la temática anterior. Representa
una escena fluvial de unas embarcaciones que llegan a una ciudad.
Los animales siguen la corriente del río. La nave es interesante
porque pese al esquematismo se puede ver el tipo de embarcación
que utilizaban.
El
Sarcófago de Hagia Triada
Sarcófago rectangular con cuatro patas y una tapa. Está
realizado en caliza policromada. Sin embargo, se utilizan las mismas
técnicas y tiene las mismas características que la
pintura mural.
Está
decorado en las patas con formas similares a las de Cnosos. También
es similar la decoración de las cenefas que rodean las escenas
principales con rosetas. En todo imperan los mismos colores: rojo,
azul y blanco. Estaba decorado por los cuatro lados: en los lados
más cortos, hay representaciones de diosas. Es uno de los
lados largos, aparecen tres personajes con un sentido procesional
que se dirigen haciendo libaciones hacia el difunto, que se encuentra
en un extremo.
En el otro lado
de la misma escena, aparecen otros tres personajes contrapuestos
haciendo un sacrificio por el difunto. En el otro lado largo hay
otra escena, también con un sentido procesional pero en la
que aparecen músicos.
Escultura
Cretense
La escultura
cretense tiene menos importancia que la pintura. No se trata de
escultura monumental, sino de pequeñas estatuillas exentas.
Están realizadas en materiales ricos: de oro y marfil (criselefantinas)
o de otros materiales como loza, porcelana vidriada y coloreada
muy fina y de terracota, más simples.
La mayoría
son esculturas femeninas que representan seguramente a diosas o
sacerdotisas.
Las pocas esculturas
masculinas son acróbatas. Se han encontrado especialmente
en santuarios y también en el oratorio de Cnosos.
Damas de
las Sepientes
Todas ellas son del minoico medio, aunque también se dieron
en el minoico reciente. Se trata de representaciones de una diosa
(probablemente la de la fertilidad) o de una sacerdotisa. Las figuras
llevan el traje característico: corpiño muy ajustado
con manga corta hasta el codo y con un gran escote que deja el pecho
al descubierto y falda con volantes. El tocado puede tener distintas
formas: un turbante, en forma de tiara, etc., y puede estar cornado
por un animal con sentido religioso. Los brazos se encuentran separados
del cuerpo, creando un buen espacio y haciendo que la figura pierda
rigidez.
Damas del
Minoico Reciente
También deben ser sacerdotisas. Son más bastas, están
realizadas en terracota. Se han encontrado muchas. Las damas son
más esquemáticas y están representadas con
los brazos hacia lo alto, la cintura estrecha y la parte inferior
acampanada, perdiendo la estructura anatómica humana. Suelen
llevar tocados muy llamativos. Son desproporcionadas, con las manos
muy grandes para resaltar la actitud orante. La falda suele estar
decorada con incisiones muy simples. Debieron estar policromadas,
pero no se ha conservado.
Acróbata
No se sabe exactamente en qué postura estaba. Era criselefantina,
con el pelo seguramente en oro, ya que se encontraron hilillos de
oro cerca de la escultura. Es posible que formara parte de un conjunto,
pero no se sabe. Es muy proporcionado y tiene una buena representación
de la anatomía.
El
Relieve
El relieve no
es muy común. Lo más importante son vasos con decoración
en relieve. Se han encontrado enteros pero sobre todo en fragmentos,
en general en buen estado. No son muy grandes. Seguramente se utilizarían
en rituales y otras funciones de uso cotidiano. Son de materiales
blandos y están decorados en bajorrelieve con figuras humanas
y también decoración geométrica. Los tres ejemplos
más importantes son el vaso del príncipe, el vaso
de los pugilistas y el vaso de los segadores.
El vaso
del príncipe
Se ha
conservado prácticamente intacto. Tiene forma cónica.
Tiene anillos concéntricos en la parte inferior y esa decoración
se repite en la parte superior y de arriba a abajo separando escenas.
El príncipe lleva un cetro y parece que se le rinde homenaje:
hay dos figuras que van hacia él. Podría ser un ritual
real o unos muchachos jugando. El príncipe recuerda mucho
al príncipe de los lises de Cnosos en cuanto a indumentaria
y adornos. La anatomía tiene una marcada musculatura. Hay
una ligerísima jerarquía de tamaños.
El vaso
de los segadores
Es de mayor tamaño. La parte baja se ha perdido. Tiene una
forma panzuda. Hay decoración humana y geométrica
que seguramente estaría en la parte inferior y que se mantiene
en la boca. Es un bajo-medio relieve, un poco más marcado
que el anterior.
Representa el
momento en que los campesinos vuelven contentos a casa del trabajo.
Tiene un sentido procesional. Llevan los útiles de la labranza
y espigas. Las figuras están en distintos planos y hay una
mayor vivacidad y una mayor riqueza en lo que se representa. La
anatomía también está marcada.
El relieve también
se aprecia en materiales nobles trabajados con la técnica
del repujado. Los restos más importantes son los conocidos
como Vasos de Vafio: son dos vasos posiblemente religiosos.
Son muy pequeños, de una altura de unos 8 cm. Se encontraron
en la tumba de Vafio, que se encuentra en Esparta, por lo que a
veces se catalogan estas escenas como micénicas, pero estilísticamente
pertenecen al arte minoico reciente. Actualmente, se encuentran
en el museo de Atenas.
Son escenas
al aire libre en las que el hombre y el toro se relacionan y en
las que aparece el paisaje. En el vaso pacífico o bucólico
aparecen representados toros pastando, uno les guía y otro
es atado por un hombre. En el vaso dramático, aparece
representado un toro que ha caído en una red, el resto huye
y uno arremete contra un hombre.
La
Cerámica Cretense
Se empieza a
hacer importante a partir del minoico medio, aunque ya se había
dado anteriormente, pero con una decoración sólo de
incisiones.
Cerámica
de Kamares
Aparece en el minoico medio. Puede tener distintas formas pero siempre
tendrán un fondo oscuro (negro o azul muy oscuro) sobre el
que se resaltan los colores blanco, ocre y naranja. Es decoración
geométrica con un predominio de la curva y la contracurva
y también aparecen algunos animales marinos.
Es frecuente
que estas vasijas tengan una forma muy característica, con
la boca muy estrecha imitando el pico de un pájaro y a ambos
lados del comienzo de la boca se ponen dos piezas salientes redondas
imitando los ojos.
Cerámica
de estilo de palacio
Aparece en el minoico reciente. Es un estilo más naturalista,
la decoración es con formas vegetales muy estilizadas y jugando
con curvas y contracurvas. Esta vegetación va subiendo desde
la base en sentido vertical hasta la parte superior de la vasija.
También hay decoración de animales marinos, como el
pulpo, la medusa, la estrella de mar, algas... estos animales no
se encuentran sólo en la base sino que llenan toda la vasija
de forma asimétrica.
El fondo sigue siendo de un color claro. Las vasijas también
siguen siendo de formas variadas, pero ya no aparece la tipología
con pico y ojos.
Vasija con
un pulpo
Es la
más representativa. Tiene una forma redondeada ligeramente
aplastada. La boca es estrecha y tiene dos pequeñas asas.
Entre los tentáculos del pulpo hay representaciones de algas.
Vasija con
decoración floral
Tiene una forma distinta. En las zonas en las que no hay decoración
floral, hay decoración geométrica como curvas o roleos.